La Asociación de Comerciantes pierde la concesión del Mercado de San Enrique

En el edificio anejo, la entidad vecinal Cuatro Caminos-Tetuán se queda sin local después de 38 años

El mes pasado se conocía ya la nueva concesión del Mercado de San Enrique, un contrato por 25 años que el Ayuntamiento ha adjudicado finalmente al consorcio formado por las empresas Global Arrakis, S.L.U. y Ferbocar Construcciones, S.A.


La Asociación de Comerciantes (han sido las dos únicas ofertas presentadas) pierde así la gestión del mercado, al frente del cual ha estado durante los últimos 30 años. La Asociación seguirá existiendo, aunque ahora su papel será muy limitado.


Aparte de su salida de la toma de decisiones, uno de los cambios más importantes que trae consigo la actual concesión es el incremento de lo que cada propietario pagará al mes por el alquiler de su establecimiento, un 21% más de IVA, que con la Asociación de Comerciantes no se abonaba, por tratarse de una entidad sin ánimo de lucro.


En dos meses deberían actualizarse los precios, indican los comerciantes de San Enrique, marcados en el nuevo pliego de condiciones. Eso si el juez no emite antes un auto en relación con el recurso presentado por la Asociación, para pedir la suspensión cautelar de la adjudicación, ante la sospecha de “presuntas irregularidades”.


El PSOE ha denunciado la elaboración de pliegos “a la carta” en la adjudicación de la concesión de los mercados municipales, que afecta, además de a San Enrique, a los de Vicálvaro, Numancia y Orcasitas, en cada uno de los cuales la solvencia económica y profesional que se exige a las empresas es distinta. El Ayuntamiento, por su parte, ha insistido en la transparencia del proceso, que corre a cargo de la Dirección General de Comercio. Los pliegos están publicados en el Boletín Oficial del Consistorio y pueden consultarse en Internet.


En este mercado de Tetuán, los trabajadores dicen estar “sorprendidos” con la entrada de la empresa privada, contraria al “fin social” que ha caracterizado la gestión de la Asociación de Comerciantes, y cuando el Ayuntamiento siempre les ha prometido defender sus intereses, señalan. Pese a ello, se muestran satisfechos de poder continuar con sus negocios.

SIN LOCAL


Pero la nueva concesión no sólo ha perjudicado a los tenderos del Mercado de San Enrique. Por primera vez, el contrato excluye el edificio contiguo, compuesto por las dos plantas superiores, donde se encontraban las oficinas, y que el Ayuntamiento quiere recuperar para usos municipales. Esto supone la salida del inmueble de la Asociación de Vecinos Cuatro Caminos-Tetuán, que desde hace 38 años tenía ahí su sede y un almacén, que le arrendaba la anterior adjudicataria del mercado, la Asociación de Comerciantes.


En la misma situación se encuentra el Banco de Alimentos de Tetuán (sobre cuya existencia la Junta esgrime no haber tenido conocimiento formal), que ha estado guardando los alimentos para familias del distrito en el almacén de la Asociación y que al cierre de esta edición estaba al borde del precinto definitivo.


La Asociación vecinal lleva más de un año recibiendo notificaciones sobre el desahucio, pero hasta el último momento ha conservado las esperanzas. Ahora, el desalojo es inminente, y aunque resta, a principios de este mes, una reunión con la concejal-presidenta del distrito, Paloma García Romero, quien aclara que el diálogo con la entidad siempre ha sido “fluido y constante”, la presidenta de la Asociación, Carmen Míguez, dice no albergar ninguna expectativa al respecto.


“Un cambio de local para nosotros conlleva la desaparición: supone la pérdida de socios y de ingresos. Hemos sido más de 500, contando con las comunidades de propietarios asociadas, que se reunían también aquí. Ahora, sin local, nos quedaríamos en 200 socios”, se lamenta Míguez.


La Junta les ha ofrecido algunas opciones, pero, según la presidenta de la Asociación, ninguna viable. “Utilizar el centro social comunitario Josefa Amar no es una alternativa: nosotros necesitamos un espacio fijo y propio”. Otra vía planteada por la Junta es la cesión de un local municipal (“el único libre de que dispone el Ayuntamiento en el distrito”, apunta García Romero) ubicado en la calle de Villaamil. Un local que, según la Asociación, necesita una amplia reforma, “y nosotros no tenemos fondos: gastaríamos lo que tenemos, aguantaríamos dos años y tendríamos que cerrarlo. Es engordar para morir”, sentencia Carmen Míguez.


La Asociación de Vecinos Cuatro Caminos-Tetuán, que ha iniciado una campaña informativa y una recogida de firmas, ya está sacando de San Enrique todas sus pertenencias. En esas cajas van 38 años de historia y de trabajo por los vecinos.

Cristina Sánchez



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